Información Extra
Valora lo que eres, acepta lo que tienes...
Como cada día, los animales bajaban al río a beber. Los turnos eran guardados escrupulosamente. Aquella mañana Orang-Hutan bajó ágilmente de su árbol, se acercó al río y se miró en la superficie del agua. Su cara se contrajo en un gesto de repugnancia. Miró su cabello greñudo, sus brazos desgarbados, su rostro tosco. Y es que Orang-Hutan odiaba su aspecto. Él ansiaba ser bello, tanto como el hermano Pájaro del Paraíso o como el gran Tigre.
¿Podrá Orang Hutan realizar su sueño?
*** VALORES IMPLÍCITOS ***
El secreto de encontrar la felicidad con uno mismo está en aceptar nuestra naturaleza y, sobre todo, en agradecer cada día los dones recibidos.